Una mirada astrológica para mayo 2025
La temporada taurina nos conecta con el tiempo que transcurre, con el devenir de instantes que se esfuman si no los habitamos de forma consciente. Pausarnos para degustar la vida, inspirar hondo, dejar que los pies anden descalzos por el pasto húmedo; eso es Tauro, la presencia aquí y ahora.
¿Cuándo entendimos que disfrutar estaba mal o que no lo merecíamos? ¿Cuándo creímos que teníamos que correr y correr?
Tauro es presencia pura, natural, desnuda. Sin querer nada, sin buscar la aprobación ni huir.
Estar sostenidas, suspendidas. Y no necesitar sostener, ni procurar, ni cumplir, ni llegar, ni nada. Sólo el sol, el viento de mar y el calor que nos abriga en sus brazos.

Luna nueva en Tauro – 27 de abril
El 27 de abril fue la Luna Nueva en Tauro, siembra creativa, luna ancestral y sagrada. Abrir el corazón para conectarnos a la sencillez de la vida.
El proceso de recuperación del poder personal ha comenzado y muestra el camino a seguir sin rodeos. El cielo baja al cuerpo. Y cuando la muerte se hace presente, cuando tocamos fondo, sabemos que la única opción posible es resurgir.
Esta Luna Nueva fue el centro de la tensión de una T cuadrada entre Sol, Luna, Marte y Plutón. Todo el poder y toda la impotencia se volvió carne a través nuestro. Si además somos plutonianos -o muy escorpianos-, sabemos perfectamente lo que eso significa: dolor e intensidad.
Estamos en la puerta de un despertar global y de un adormecimiento total. Ambos polos operando en simultáneo.
La conciencia vincular nos reúne con la inteligencia sistémica de nuestra querida Tierra, mientras que el miedo a tanta responsabilidad nos empequeñece y encierra.
Cada quien tiene su propia lucha, por eso se trata de ser impecables con lo que nos toca.
La conciencia de ser trama global ha llegado, ahora pide cuerpo y alas. Habitamos el proceso, honramos el crecimiento orgánico. Comienza un ciclo de claridad, de darle lugar a lo realmente valioso e importante en la vida y dar luz a los talentos más preciados.
¿Podremos transformar las heridas en alimento para el alma?

Marte en Leo oposición a Plutón en Acuario
También en abril Marte llegó al signo de Leo haciendo la última oposición a Plutón en Acuario. Cuando el Sol entró en Tauro cerró una T cuadrada con ambos. La energía fija nos sujeta cortando el aire y sentimos el miedo propio de los cambios.
Es natural congelarnos como primera reacción ante la incertidumbre. El temor acompaña los grandes pasos. El tema es qué hacemos con eso que sentimos, si lo circulamos y lo dejamos pasar por el corazón o nos quedamos abrazados a emociones desgastantes.
Esta T cuadrada cierra un proceso que comenzó en noviembre del 2024, cuando Marte se opuso a Plutón, pero en el eje Cáncer-Capricornio. El segundo encuentro exacto fue este enero, cuando Marte retrogradaba en Leo y Plutón mantenía su posición en Acuario.
La tensión llegó ahora al desenlace. El Sol los coronó a ambos con la luz de la tierra fértil y mansa.
¿Qué deseos cayeron? ¿Qué luchas perdieron poder? ¿Qué decisiones tomamos hacia el camino de evolución del alma?
Cada situación adversa llega con el potencial de aprendizaje. Cada batalla externa es un reflejo de un conflicto con áreas de mí misma que desconozco.
El agradecimiento como poder personal. El despertar de la consciencia como consecuencia de las pérdidas del Ego. Los desafíos de la vida vueltos barro para la transformación de quienes somos.
La mayor autenticidad no llega por repetición, sino por asumir el riesgo de ir más allá de lo que controlamos.
Celebrar la muerte de las formas heredadas.
Honrar a la energía masculina como posibilitadora del movimiento hacia adelante, pero abrazada a la belleza femenina que danza en eternas ondulaciones.
Ningún deseo dura para siempre. Tampoco durarán las relaciones ni viviremos mil años las personas que ahora habitamos este misterio inconmensurable.
¿Sirve de algo demorarnos?

El universo vincular
El campo vincular se puso de relieve pues, también en abril, vivimos la Luna Llena en Libra (12/4) y nos espera la Luna Llena en Escorpio el 12 de mayo.
¿Con quiénes y de qué maneras creamos el mundo?
Atravesamos la oscuridad porque estamos dando nacimiento a algo nuevo, pero venimos de una gran inundación emocional.
Saturno y Venus formaron un stellium en Piscis junto al Nodo Norte. Mercurio los acompañó unas semanas también. Nos sumergimos en nosotros mismos, plagados de imágenes y percepciones sin nombre, con la sensación de ahogo o saturación, pero conectados con el dolor de la humanidad toda.
Se regenera nuestra tierra-cuerpo y se iluminan talentos negados. Sin embargo, el mayor valor emergerá cuando aceptemos el miedo a morir, a que los ciclos terminen y a contactar con la soledad.
Respondemos por las relaciones que inventamos y crecemos gracias a cada decisión difícil que tomamos con ellas.
Aunque nos queramos esconder en la víctima ya no podremos. Tampoco se sostiene la complacencia por miedo al rechazo ni el corte abrupto del “puedo sola, no necesito a nadie”.
Somos responsables por quienes amamos.
La plenitud escorpiana de mediados de mayo nos invitará a habitar la vida y la muerte, a aceptar el vacío como fuente inagotable de fertilidad.
Será augurio de crisis y nuevo tiempo.
Mantengamos los sentidos en alerta.
Sabia es la espera.

Sentimos a Neptuno en Aries
Neptuno entró en Aries el 30 de marzo. El final de un tiempo nuevo ha comenzado.
Anhelamos discernimiento para disipar la neblina que nos distrae. Necesitamos recibir la semilla de la conciencia de unidad en nuestros corazones.
La poca claridad y confusión son la marca de este tiempo, tanto como la hipersensibilidad y la apertura hacia los campos más sutiles de conciencia.
La neptuniana – transpersonal e ilimitada- no está integrada en este mundo que prioriza la propiedad privada. Aquí nada es de nadie, todo es resonante con todo y no existen las formas.
A nivel grupal, nos puede ampliar la empatía y comprensión de las diferencias. A nivel individual, nos habilita a pasar por el cuerpo todo el potencial artístico y espiritual que quizás tuvimos que reprimir por miedo o rechazo.
Sin embargo, el caos perceptual puede llevarnos a reforzar todo lo que entendamos como “propio” y “nuestro” como acto defensivo.
En vez de ampliar la empatía, este contacto celeste puede in-sensibilizarnos y adormecernos con fantasías y hechizos. La reacción de nuestro lado Cáncer y Leo es temible: reafirma la familia, la nación, la pertenencia y la importancia personal por encima del bien común.
Transformar el miedo en amor implica aceptar el lado reactivo, abrazar a nuestro “ego” -que teme perderse en el océano inconsciente- y abrir el “portal a lo sagrado en nosotros” para “responder a las transparencias del alma” (A. Lodi) / Cita: Acerca de Neptuno en tránsito al Sol | Alejandro Lodi, Astrología (wordpress.com)

Saturno en Aries conjunción Neptuno
Saturno llegará al signo de Aries en mayo, abrazando a Neptuno en conjunción. Pero no nos olvidemos que ambos vienen de Piscis y de ser potenciados por el Nodo Norte.
Empatía, amor sin límite por los otros y por la naturaleza, sentir en el propio corazón el dolor de los demás.
Esta conjunción pondrá de manifiesto la disolución de los bordes y límites: somos una trama global interrelacionada y no hay cómo “escapar” a la mutua afectación.
Saturno es límite. Límite es amor. En la vida nos movemos expansivamente dentro de los límites que generamos, con la belleza y el peligro que eso implica.
Podemos armar marcos amorosos y contenedores donde expresarnos, pero también podemos ponernos techos muy estrechos que nos inhiban y aplasten, acabando con nuestra vitalidad.
Durante muchos años de nuestro desarrollo dependemos de los bordes de nuestro entorno y “reaccionamos” a ellos de manera obediente, rebelde o apática. Pero a medida que crecemos y maduramos, vamos tomando a Saturno a nuestro modo, volviéndonos autores de nuestra vida y encontrando respuestas para las situaciones de la vida cada vez más auténticas y creativas -o al menos a eso aspiramos-.
Las reglas permiten el juego. Los bordes habilitan el espacio. Sin Saturno no hay realidad donde existir. Tampoco hay parámetros con los que regirnos.
Lo interesante es conectar con esos puntos irrenunciables, esos valores que nosotros consideramos importantes, aunque el hogar de origen y/o la sociedad no los consideren.
Cuando nos paramos en nuestros propios pies y caminos según nuestro criterio, también encontramos a otros seres que quieran jugar nuestros juegos y crear nuevos bordes cada vez que haga falta.
Te recomiendo mirar el vivo de Luna Nueva en Tauro para ampliar los conceptos d e este artículo: https://www.youtube.com/live/RlsnQBaJmwU?feature=shared