Algunas configuraciones del cielo nos traspasan. #Neptuno perfecciona su conjunción con el #Sol en #piscis y el viaje se vuelve caos.
Para el mundo de las formas, lo pisciano es desorden, nebulosa y angustia. Vivido desde adentro, Neptuno es resonancia y espiritualidad.
Este encuentro celeste es un #stellium que incluye a #Venus. Así son tocadas nuestras fibras sensibles y ampliamos la percepción hacia aquello que nos llama desde el éter.
Los mensajes no salen con palabras; quizás sean música. Las fantasías cobran cuerpo y nuestros personajes oníricos nos acompañan tardes enteras. ¿Cómo vivir este instante cósmico? Oscilando entre la forma y la no forma. Nadando en aguas artísticas y/o hundiéndonos en múltiples desórdenes psíquicos.
Neptuno es el dios del océano, representado desde el mundo greco-romano por una figura masculina, aunque originalmente la Mar era mujer. Esa esencia nunca se pierde.
En el inconsciente, presente, pasado y futuro son lo mismo. Sin continuidad. La vivencia emocional es puro presente. Se rompe la lógica de lo real porque el mundo sensible puede emerger en cualquier momento trayendo información de todos los tiempos. La herida colectiva se actualiza. Este sistema desigual deja en carne viva a lxs seres sintientes.
Podemos resonar con todos los tiempos y todos los espacios. Es tiempo de perder el control. O de aceptar que realmente nunca lo tuvimos.
Los sueños (y las pesadillas) se intensifican. Se activan las ganas de ser arrastradxs por las olas de la marea colectiva tanto como las resistencias a ellas, con el consecuente sufrimiento.
Neptuno en Piscis está cerrando un ciclo de 164 años comenzado en 1861. En ese tiempo como humanidad estábamos recién aboliendo la esclavitud dentro de nuestra especie (aunque aún no lo hemos logrado completamente) Hoy ya podríamos llegar al final de la explotación al respecto de la naturaleza toda, humana y no humana. Activar la dimensión sensible y empática que el patriarcado ha corrompido.
Resonar con el sufrimiento ajeno porque también soy el/la/lo otrx.
Con nuestras manos (#virgo) entretejer el sagrado oficio (piscis) admitiendo el amor por todo. Conectar solidariamente con lxs que sufren las carencias de un mundo desigual.
Que esta conjunción nos prepare para la siembra de #lunanueva y nos libere del cruel individualismo.
